27 dic 2014

Predicción de eclipses mediante el Mecanismo de Antikythera

    El Mecanismo de Antikythera era capaz de predecir, basándose en el ciclo lunar Saros de 223 días, los eclipses que se producirían con mucha antelación. Estos se indican en una espiral de cuatro turnos (vueltas) por glifos que describen el tipo y tiempo de eclipse e incluyen con letras un índice alfabético referido a las inscripciones de eclipses solaresÉste índice con grupos de letras, describe las características comunes del eclipse.  
   Sin embargo, la agrupación y ordenación de las letras del índice, la organización de las inscripciones y los tiempos de eclipses aún no habían sido aclaradas. 
Una nueva lectura e interpretación de los datos de la placa posterior del Mecanismo de Antikythera, incluyendo los glifos, las letras índices y las inscripciones de eclipses, ha dado lugar a cambios sustanciales en los trabajos publicados anteriormente.
Sobre esta base, los autores del artículo presentan dos modelos aritméticos para explicar el esquema de predicción del eclipse total. 
  1. El primer modelo resuelve la distribución de los glifos, la agrupación y ordenamiento "anómala" de las letras índices y la estructura de las inscripciones. También implica la existencia de inscripciones de eclipses lunares que se han perdido.
  2. El segundo modelo detalla la distribución temporal de glifos y explica la espiral de cuatro giros del Dial de Saros. Juntos, estos modelos, nos esclarecen el desarrollo sorprendentemente temprano del Mecanismo de Antikythera.
  
  Los antiguos griegos construyeron una máquina capaz de predecir, con años de antelación, no sólo los eclipses, sino también una notable variedad de sus características, tales como direcciones de oscurecimiento, magnitud, color, diámetro angular de la Luna, la relación con el nodo y el eclipse de la Luna y el tiempo. 
   Pese a que con nuestros conocimientos actuales sabemos que no era una predicción del todo exacta, fue un logro asombroso para su época.
Fuente: Freeth T (2014) Eclipse Prediction on the Ancient Greek Astronomical Calculating Machine Known as the Antikythera Mechanism. PLoS ONE 9(7): e103275. doi:10.1371/journal.pone.0103275

25 dic 2014

El cuerpo calloso de Albert Einstein

  Fue sin duda el físico más importante del siglo XX y su extraordinaria inteligencia ha intrigado enormemente tanto a científicos como al público en general. Aunque diversos estudios se han centraron principalmente en las características histológicas y morfológicas del cerebro de Einstein tras su muerte, los sustratos del genio de Einstein siguen todavía siendo un misterio (Diamond et al., 1985; Anderson y Harvey, 1996; Kigar et al., 1997; Hines, 1998; Witelson et al, 1999a, b; Colombo et al, 2006;. Falk, 2009). Recientemente, Falk et al. (2013) analizaron 14 fotografías recientemente descubiertas y encontraron que el cerebro de Einstein tenía un córtex prefrontal extraordinario, y que las partes inferiores de las cortezas somatosensoriales y motoras primarias estaban considerablemente expandidas en el hemisferio izquierdo.   Entre estas 14 imágenes se encontraban las de la superficie medial izquierda y derecha cerebro de Einstein, en las que el cuerpo calloso se mostraba con gran resolución y precisión.  
  El cuerpo calloso es el principal haz de fibras nerviosas que conecta las regiones corticales de los hemisferios cerebrales y en el cerebro humano y desempeña un papel esencial en la integración de la información transferida entre los hemisferios través de sus miles de axones (Aboitiz et al., 1992). Las dos fotografías de la superficie medial de los hemisferios cerebrales de Einstein proporcionan la base para el presente estudio.
Este estudio es el primero en investigar la conectividad de los hemisferios cerebrales de Einstein mediante la comparación de la morfología de su cuerpo calloso con la de 15 hombres sanos de edad avanzada y 52 hombres jóvenes sanos.
  Los autores concluyen que el cuerpo calloso de Einstein era más grueso en la gran mayoría de las subregiones que sus partes correspondientes en el cuerpo calloso de los controles de edad avanzada, y que el cuerpo calloso de Einstein era más grueso en rostrum genu, cuerpo medial, istmo, y (especialmente) el esplenio respecto a los grupos de control más jóvenes.  
  Estos hallazgos muestran que la conectividad entre los dos hemisferios era mejor  en líneas generales en Einstein en comparación con los controles. 
  Los resultados sugieren que los dones intelectuales de Einstein no sólo se relacionan con especializaciones en el plegamiento cortical y arquitectura celular en ciertas regiones del cerebro, sino que también participa la comunicación coordinada entre los hemisferios cerebrales. Por último, pero no menos importante, el enfoque mejorado para la medición de cuerpo calloso utilizado en este estudio puede tener aplicaciones más generales en los estudios de esta estructura cerebral.
Fuente: The corpus callosum of Albert Einstein‘s brain: another clue to his high intelligence? Weiwei Men, Dean Falk, Tao Sun, Weibo Chen, Jianqi Li, Dazhi Yin, Lili Zang and Mingxia Fan. Brain (2013).

 

Las correlaciones entre la estructura demográfica, musical, genética y el lenguaje.


Los autores, entre los que destacamos a Steven Brown, presentan en su estudio lo que a su entender podría ser 
  La primera evidencia cuantitativa de que la música y la genética pueden haber coevolucionado demostrando correlaciones significativas entre las canciones populares de distintas etnias y la variación del ADN mitocondrial de nueve pueblos indígenas de Taiwán.
  Estas correlaciones fueron de una magnitud comparable a las existentes entre la lengua y los genes en las mismas poblaciones, aunque la música y la lengua no se correlacionaron significativamente con el uno al otro. Un examen de la estructura genetica poblacional  mostró paralelos más fuertes con la música que con lengua.
  En general, los resultados sugieren que la música podría tener una profundidad temporal suficiente como para volver sobre antiguos movimientos poblacionales y, además, que podría capturar distintos aspectos de la historia de la población que la lengua.
Concluyen por lo tanto, que la música puede servir potencialmenter como un nuevo marcador de las migraciones humanas para complementar la genética, el idioma y otros marcadores usualmente empleados en este tipo de estudios.



Fuente: Brown S, Savage PE, Ko AM-S, Stoneking M, Ko Y-C, Loo J-H, Trejaut JA. 2014 Correlations in the population structure of music, genes and language. Proc. R. Soc. B 281 : 20132072.